Nosotras, mujeres palestinas e israelíes de todos los ámbitos de la vida, estamos unidas en el deseo humano de un futuro de paz, libertad, igualdad, derechos y seguridad para nuestros hijos y las próximas generaciones.

Creemos que la mayoría de los pueblos de nuestras naciones también comparten nuestro deseo mutuo.
Por lo tanto, exigimos que nuestros dirigentes escuchen nuestro llamamiento y comiencen sin demora las conversaciones y negociaciones de paz, con un compromiso decidido de lograr una solución política al largo y doloroso conflicto, dentro de un plazo limitado.

Hacemos un llamamiento a la población de ambas naciones: palestina e israelí, y los pueblos de la región para que se sumen a nuestro llamado y demuestren su apoyo para la resolución del conflicto.

Hacemos un llamado a las mujeres del mundo para que nos apoyen por un futuro de paz y seguridad, prosperidad, dignidad y libertad para nosotras mismas, los niños y la gente de la región.

Hacemos un llamamiento a las personas de paz, tanto jóvenes como mayores, a los líderes religiosos, personas de influencia, líderes comunitarios, educadores, etc, para sumar sus voces a nuestro llamado.

Invitamos a nuestros líderes a comprometerse con la voz y la voluntad de los pueblos en este llamado a la resolución del conflicto y al logro de una paz inclusiva y justa. Estamos comprometidas a asumir un papel activo en el proceso de negociación hasta su resolución exitosa, de acuerdo con la Resolución 1325 de la ONU.

Hacemos un llamamiento a nuestros líderes para que muestren coraje y visión a fin de lograr este cambio histórico, al que todos aspiramos. Nos unimos con determinación y asociación para devolver la esperanza a nuestros pueblos.